El FC Barcelona anunció oficialmente que continuará jugando en el Estadi Olímpic Lluís Companys durante todo enero de 2024. Esta decisión se tomó debido a retrasos en la reapertura del Spotify Camp Nou, que se esperaba inicialmente para el 125 aniversario del club el pasado noviembre, pero ahora se pospone hasta mediados de febrero. Este aplazamiento es relevante ya que afecta a los seguidores y a la logística del club, quienes deberán adaptarse hasta obtener las licencias correspondientes de entidades como el Ayuntamiento de Barcelona, los Bomberos, la Liga, la RFEF y la UEFA.

Decisión del FC Barcelona

El FC Barcelona comunicó a sus socios y abonados que el regreso al Spotify Camp Nou se realizará con un aforo limitado a 64,000 personas, distribuidos entre la primera y la segunda gradería. Este control de aforo dependerá de la aprobación de las autoridades pertinentes, quienes deben asegurar que todas las condiciones de seguridad estén cumplidas.

Impacto en los Socios y Abonados

Para los seguidores del FC Barcelona, este anuncio significa que deberán continuar asistiendo a los partidos en el Estadi Olímpic Lluís Companys, un recinto diferente del histórico Spotify Camp Nou. Esto podría implicar ajustes en el transporte y planificación personal de los abonados durante el primer mes del próximo año.

Exigencias de Licencias

La reapertura del Spotify Camp Nou está sujeta a la obtención de diversas licencias y aprobaciones por parte de varias entidades, incluyendo el Ayuntamiento de Barcelona. Sin estos permisos, el estadio no podrá recibir público, poniendo en riesgo las actividades del club para el inicio de la temporada.

El comunicado del club señaló la importancia de cumplir con todas las normas establecidas por las autoridades antes de hacer efectiva la reapertura del estadio.

• El FC Barcelona seguirá jugando en el Estadi Olímpic Lluís Companys hasta finales de enero de 2024.
• El objetivo es reabrir el Spotify Camp Nou con aforo limitado en febrero, sujeto a la aprobación de licencias necesarias.
• Las autorizaciones deben ser otorgadas por el Ayuntamiento de Barcelona, la Liga, la RFEF, y otras entidades reguladoras.
• Se espera que el cambio tenga un impacto logístico para los seguidores del club.