España registra menos de un millón de afiliados agrícolas por primera vez este siglo. A la vez, los servicios ganan cada vez más peso en la economía del país. El número de trabajadores en el campo español está cayendo de forma inexorable desde hace años en una tendencia que ya todos catalogan como preocupante. En el mes de agosto, el paro en la agricultura registró una caída del 2,6%, situándose en 87.426 desempleados, una bajada del 14,24% respecto al mismo periodo del año anterior. Por primera vez desde mediados de los 90, la cifra de ocupación del empleo agrario ha bajado del millón de personas. Además, la proporción de trabajadores que se dedican al sector primario en España -agricultura, ganadería y pesca- nunca antes había sido tan baja.
Caída incesante en empleo agrícola
En los últimos años, España ha experimentado una caída constante en el empleo agrícola. Esta tendencia se ha mantenido en el mes de agosto, donde se ha registrado un descenso del 2,6% en el paro agrícola en comparación con el mes anterior. Esta disminución se traduce en 2.337 desempleados menos en el sector primario. Además, la cifra de ocupación del empleo agrario ha caído por debajo del millón de personas, algo que no ocurría desde mediados de los 90. Esto indica la pérdida de fuerza de este sector en la economía española.
Importancia del sector agrícola en España
La agricultura ha sido tradicionalmente un sector fundamental en la economía española, sin embargo, en los últimos años ha perdido peso en comparación con otros sectores como los servicios. El hecho de que España registre menos de un millón de afiliados agrícolas por primera vez este siglo es una señal preocupante. Esto pone de manifiesto la necesidad de buscar soluciones que impulsen la actividad agrícola y eviten la pérdida de empleos en el sector.
Impacto en la economía y el empleo
La disminución del empleo agrícola tiene un impacto directo en la economía y en el mercado laboral. La caída del paro en la agricultura en agosto representa una disminución del 2,6% en comparación con el mes anterior, lo cual es una buena noticia en términos de empleo. Sin embargo, el hecho de que cada vez haya menos personas trabajando en el sector agrícola puede tener consecuencias negativas a largo plazo. La concentración de la actividad económica en los servicios puede generar desequilibrios y aumentar la dependencia de otros sectores, lo cual puede ser perjudicial para la economía en su conjunto.
Fuentes:
– Ministerio de Empleo y Seguridad Social de España
– Instituto Nacional de Estadística de España
Resumen de la noticia:
- El número de afiliados agrícolas en España cae por debajo de un millón por primera vez en este siglo.
- El paro en la agricultura disminuye un 2,6% en agosto, situándose en 87.426 desempleados.
- La cifra de ocupación del empleo agrario cae por debajo del millón de personas por primera vez desde mediados de los 90.
- La reducción del empleo agrícola refleja la pérdida de peso del sector primario en la economía española.
- Esta disminución puede tener consecuencias negativas a largo plazo en la economía y el empleo del país.