Las fuertes lluvias torrenciales que golpean el Sahel desde finales del mes de junio han provocado más de 550 muertos, más de dos millones de personas afectadas y graves daños materiales en varios países de la región, entre ellos Nigeria y Níger. Save the Children advierte de que se enfrentan a enfermedades y la hambruna. En este contexto, la ciudad de Maradi, en Níger, se ha visto especialmente afectada, ya que gran parte de las casas están hechas de barro. Las fuertes precipitaciones han llevado al desbordamiento del río Níger, que atraviesa el país, causando el colapso de viviendas y un alto riesgo para la población.

Lluvias torrenciales amenazan con desbordamientos en el río Níger

En la capital de Níger, Niamey, se ha declarado la alerta roja por el desbordamiento del río Níger, que amenaza con inundar la ciudad. Las fuertes lluvias han llevado al aumento del caudal del río, poniendo en grave peligro a la población. La situación es especialmente preocupante en los distritos de Niamey, donde se han registrado fuertes precipitaciones. Las autoridades han puesto en marcha medidas de emergencia para evacuar a las personas afectadas y salvaguardar sus vidas.

Más de 700,000 personas afectadas y daños materiales

Las lluvias torrenciales han afectado a más de 700,000 personas en Níger, provocando daños importantes en infraestructuras y viviendas. Muchas casas, especialmente en la ciudad de Maradi, están hechas de barro, lo que las hace especialmente vulnerables a las inundaciones. Además, se han registrado numerosos derrumbes de viviendas debido a la intensidad de las lluvias. Estas inundaciones han dejado importantes pérdidas económicas y dificultan aún más la lucha contra la pobreza en la región.

Acción urgente para enfrentar las consecuencias

Ante esta situación de emergencia, se requiere una acción urgente para hacer frente a las consecuencias de las fuertes inundaciones en Níger y otros países del Sahel. Save the Children advierte de que la población está en riesgo de sufrir enfermedades transmitidas por el agua y la falta de alimentos, lo que podría agravar aún más la crisis humanitaria en la región. Es crucial que se destinen recursos para proporcionar asistencia humanitaria a las personas afectadas y garantizar su supervivencia.

• Las fuertes lluvias torrenciales han provocado más de 550 muertos en el Sahel.
• Más de dos millones de personas están siendo afectadas por las inundaciones en Nigeria y Níger.
• La ciudad de Maradi, en Níger, ha sufrido graves daños debido a las lluvias torrenciales.
• El desbordamiento del río Níger representa un alto riesgo para la población de Niamey.
• Más de 700,000 personas han sido afectadas y se han registrado importantes daños materiales.
• Se requiere una acción urgente para hacer frente a las consecuencias de las inundaciones.