El pasado martes, en Madrid, falleció Carlos Serrano Valero, un destacado defensor de las víctimas del síndrome del aceite tóxico (SAT), el mayor envenenamiento masivo en la historia de España. Serrano fue portavoz y coordinador de la plataforma Seguimos Viviendo y se encontraba a la espera de un doble trasplante de pulmón. Su muerte marca el fin de una era en la lucha por los derechos y la justicia de las personas afectadas por esta tragedia sanitaria, subrayando la importancia de garantizar el apoyo continuo a los supervivientes y la sensibilización sobre los efectos a largo plazo de tales desastres.

Un legado de defensa y lucha

Carlos Serrano Valero dedicó su vida a la causa de los afectados por el síndrome del aceite tóxico, un escándalo sanitario que se remonta a la década de 1980. Este síndrome fue provocado por la distribución de aceite de colza desnaturalizado, que causó la muerte de unas 5,000 personas y dejó a más de 20,000 con secuelas graves. Serrano, a través de su liderazgo en la plataforma Seguimos Viviendo, luchó incansablemente por el reconocimiento, la compensación y el respeto a los derechos de los supervivientes. Su dedicación no solo trajo visibilidad al tema, sino que también ayudó a mantener la presión sobre las autoridades para que se hicieran responsables de los hechos.

El impacto continuo del SAT

El síndrome del aceite tóxico no solo dejó marcas físicas sino también sociales y emocionales en la comunidad afectada. A día de hoy, muchos supervivientes siguen enfrentando problemas de salud complejos y requieren apoyo médico y social continuo. La labor de Serrano Valero fue fundamental para crear espacios de apoyo mutuo y diálogo con las instituciones, aunque su partida deja un vacío profundo. La cuestión ahora es cómo avanzar en la defensa de estos derechos sin su guía e inspiración.

Reacciones ante su muerte

La muerte de Carlos Serrano Valero ha generado numerosas reacciones de condolencia dentro y fuera de España. Compañeros de la plataforma Seguimos Viviendo han expresado su pesar y han reafirmado su compromiso de continuar su legado. Desde diferentes ámbitos políticos y sociales, se ha reconocido su inquebrantable lucha por la justicia y su capacidad para movilizar a las comunidades afectadas. En palabras de uno de sus colegas:

“Carlos fue una fuente de fortaleza y esperanza para todos nosotros. Su legado vivirá en nuestra lucha diaria.”

• Carlos Serrano Valero falleció en Madrid el martes, mientras esperaba un doble trasplante de pulmón.
• Fue portavoz y coordinador de la plataforma Seguimos Viviendo, centrada en los afectados por el síndrome del aceite tóxico.
• El SAT es considerado el mayor envenenamiento masivo en España, con miles de víctimas y secuelas permanentes.
• Serrano Valero es recordado por su incansable defensa de los derechos de los supervivientes del SAT.
• Su muerte ha generado numerosas reacciones de condolencia y reafirmaciones de continuar su legado.