El reconocido ilusionista argentino René Lavand falleció el 7 de febrero de 2015 en Tandil. Lavand, quien perdió su mano derecha en un accidente a los 9 años, se destacó en el mundo del espectáculo por su habilidad en el arte de la magia con cartas. Su partida dejó una huella imborrable en la industria de la magia.
René Lavand: una vida marcada por la superación
René Lavand nació el 24 de septiembre de 1928 en Buenos Aires, Argentina. A los 9 años, sufrió un accidente que le provocó la amputación de su mano derecha. A pesar de esta adversidad, Lavand no permitió que esto detuviera su pasión por la magia. Aprendió a manipular las cartas con una sola mano y desarrolló una destreza sin igual en el arte de la ilusión.
A lo largo de su carrera, Lavand se convirtió en un referente en el mundo de la magia, ganándose el respeto y la admiración de grandes exponentes del ilusionismo, como el famoso ilusionista David Copperfield.
Sus actuaciones cautivaban al público con su estilo único y su capacidad para contar historias a través de la magia. Lavand se destacaba por su habilidad para realizar ilusiones con una sola mano, desafiando las limitaciones físicas y demostrando que no hay obstáculos insuperables en la búsqueda de los sueños.
La muerte de René Lavand representa una gran pérdida para el mundo de la magia, ya que su legado continúa inspirando a futuras generaciones de ilusionistas. Su capacidad para superar las adversidades y su extraordinario talento en el arte de la magia lo convierten en un referente indiscutible en la historia de la ilusión.
“La vida es una ilusión, un sueño, y lo que cuenta es cómo se desarrolla y cómo se concluye”. – René Lavand