Una de las dos semanas más ocupadas para vacacionar en México es la Semana Santa, que va desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Pascua. La otra semana en el año en la que la mayoría de las personas tienen al menos varios días libres es la semana entre Navidad y Año Nuevo.

Época de mucho viaje por México

Al igual que el Día de Acción de Gracias en Estados Unidos, la Semana Santa es cuando los mexicanos viajan para estar con sus familias, y también es la época del año más popular para las excursiones familiares. Las escuelas están cerradas durante dos semanas y los trabajadores reservan tiempo libre y se dirigen a las playas de México o se toman vacaciones en el extranjero.

Si viajas a alguno de los destinos turísticos populares de México durante la Semana Santa, espera que los aeropuertos y las estaciones de autobuses estén llenos de gente, las autopistas interestatales alrededor de las principales ciudades estén congestionadas, los hoteles estén completamente reservados y las atracciones turísticas estén repletas de personas.

Por lo general, una primera ola de vacacionistas que salen de las principales ciudades llega el fin de semana antes de la semana de Pascua, y una segunda ola sale el Jueves Santo y el Viernes Santo.

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Las tranquilas calles de la Ciudad de México durante la Semana Santa

Desde la Ciudad de México, las carreteras suelen estar congestionadas durante horas en dirección sur hacia Cuernavaca y Acapulco, hacia el sureste hacia Puebla y Veracruz, hacia el oeste hacia Guadalajara y Morelia o hacia el norte hacia Querétaro y el corazón colonial.

Para los chilangos que se quedan en casa durante las vacaciones, o para los visitantes que aprecian un descanso de las multitudes, este éxodo metropolitano tiene ventajas ya que las calles de la ciudad capital se vacían durante una semana. Un viaje que normalmente puede durar hasta dos horas durante un día laborable normal se completa en 30 minutos. Los espacios de estacionamiento se encuentran fácilmente, los restaurantes y bares tienen menos afluencia de gente. Los museos y parques están más tranquilos y las filas para ver exposiciones especiales son más cortas.

La semana de Pascua es un momento ideal para pasear por el centro histórico de la capital, visitar el famoso Museo de Antropología en Reforma, dar paseos tranquilos y disfrutar de un almuerzo tranquilo en los populares enclaves coloniales de San Ángel y Coyoacán.

Si te gusta evitar las multitudes y tienes un horario flexible, visitar la Ciudad de México durante la Semana Santa y luego dirigirte a las playas y ciudades coloniales de México después de que hayan pasado las vacaciones de Pascua te brindará lo mejor de ambas situaciones: disfrutarás de una capital tranquila y una visita más tranquila, fuera de temporada alta, a una playa y/o región colonial.

La Semana Santa y la actividad económica en México

Las vacaciones de Semana Santa también tienen varios efectos en la actividad económica. Ahora, al igual que en las semanas previas a las vacaciones de fin de año, los costos de los hoteles y los vuelos aumentan debido a la demanda adicional.

Estos precios generalmente vuelven a bajar después de las vacaciones, pero por supuesto, para entonces la mayoría de las personas ya han viajado y vacacionado a precios más altos. Las personas con hijos en edad escolar o que trabajan en empleos formales a menudo tienen una flexibilidad limitada para elegir ir de vacaciones fuera de temporada alta, pero aquellos que están jubilados o tienen estilos de trabajo flexibles pueden ahorrar dinero, y evitar el caos de viajar, evitando los vuelos y los resorts durante esta época del año.

Ya que la semana de la Semana Santa se mueve entre abril y marzo, también tiene un efecto en los indicadores económicos. Las vacaciones generan ventas activas en tiendas, supermercados, hoteles y servicios turísticos, al mismo tiempo que afectan negativamente otras actividades como fábricas y obras de construcción, muchas de las cuales cierran al menos el jueves y viernes de la Semana Santa.

Esos dos días son días festivos oficiales en México y los bancos y los mercados financieros también están cerrados. Si la Semana Santa cae en marzo un año y en abril al siguiente, marzo tendrá mejores números de producción el segundo año y abril tendrá peores números. Sin embargo, los minoristas informarán mejores resultados para el mes que tuvo el feriado. Todo se equilibra al final.

Planificación de viajes cerca del final de las vacaciones

Al final de las vacaciones de la Semana Santa, los flujos de tráfico regresan a sus estados habituales de congestión, pero esta vez con miles de personas que se desplazan por las carreteras de regreso a las ciudades, especialmente a la Ciudad de México. Si tienes que viajar en la Ciudad de México el primer lunes después de las dos semanas de vacaciones de Semana Santa, date mucho tiempo y paciencia para tu viaje a través de la ciudad.

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